"Hay dos clases de padres: el padre empresario y el padre agricultor. El padre empresario invierte y exige resultados. Si tiene éxito sus hijos serán máquinas perfectas. El padre agricultor siembra con amor, riega con cariño, espera con ilusión, y disfruta viendo crecer la vida. Si tiene éxito sus hijos serán personas felices con raíces profundas"